viernes, 30 de marzo de 2018

Carcomen.

Heme aquí.
Frágil y
temeroso.

Desganado y medio mentiroso, 
aún vulnerable,
ofuscado
trémulo e impertinente.

Cansado,
solo,
triste y melancólico.

¿Es normal buscarle rumbo a todo?

Aún veo tus ojos...
jóvenes enérgicos y estoicos.

Resistente a los embates del mundo,
los gritos,
las luces,
lo escarlata variando a negro.

Me veo, observo al espejo, y casi treinta años después,
 aún no me reconozco
¿Quién soy?

... ¿Hacia dónde vamos? El de hoy, el de hace un año, el de veinte, el de quince y el de uno

Y ahí sigue,
ahí sigo,
acá estoy.

Y pasa la vida ante mis ojos,
sigue el camino ante mis pies,
y los rostros en mi corazón.

El tiempo no se detiene,
en lo físico hay cambios,
en lo anímico vaivenes -por acá todo normal entonces-
en lo sentimental aún errante, de cierta manera patético,
en lo emocional, como siempre... fugaz.

Todos juzgan
todos anhelan
todos buscan...
¿Existirá aquel que haya encontrado?

Y de cierta manera creo necesitarte, pero no he de decírtelo ¿De qué sirve el consuelo, si hay conflictos de interés?

Otro día,
una nueva mañana...
I can't fill the void.


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