lunes, 6 de agosto de 2012

Todo me sabe a ti

Un amanecer brillante.
El viento volando las hojas que este invierno botó...
La risa sincera de un niño.
Las flores, los días soleados, los parques, las aves buscando alimento, y absolutamente todas esas cursilerías que ahora me resultan tan dulces...


Todo me recuerda a ti

¿Y como no habría de hacerlo, si solo entre tus brazos sigue la emoción latente como aquella primera vez que nuestros cuerpos acariciaron al otro?

Me resultas simplemente única...
tanto que a veces me pregunto si realmente serás real.

Y luego te observo, y ahí estás... en calma, femenina, tras aquellas pequeñas ventanas que cubren tus ojos, y te veo, suspiro, y entonces me pregunto ¿habrás algún día de partir de mi lado?
Entonces me invade el miedo, pero prefiero dejar de pensarlo y suspiro de nuevo, veo tu rostro y pienso "eres tú, quien quiero tener por el resto de mi vida, no te vayas ni mires para atrás, que te prometo un futuro del que solo se ha escrito en los cuentos", entonces pareciera que lees mi mente, me miras fugazmente y dejo de pensar. Sonrío. Me estremeces, y doy las gracias al mundo por ponerme a tu lado.

Eres simplemente encantadora.


No hay comentarios:

Publicar un comentario