miércoles, 14 de diciembre de 2011

¿Ser/emos?

Daniel Andrés Utreras Aleuy se quema, se quema y se reinventa entre los recuerdos.
Es el umbral entre el recuerdo y la sensación a ratos poco visible...
Sentires y vivires se confunden entre borrascosas nubes en algún lugar entre el corazón, la mente y la razón...

Imagina corazones, arráncalos y desapareceremos entre escenas que creíamos lejanas. Hoy la mente intenta dejarnos en vano algún sentimiento de culpa, algún sentido para y por mi/tu culpa.
Si estamos aquí es por nuestra causa, nada nuevo es para los dos el tomar de la mano a quien quieres. Nuevo es este sentido de razón que "sin razón" nos ha mantenido en pie aún.

No. No me iré. No voy a pasar las horas acariciando tu pelo solo para desecharlo cuando el halo entre el tu y el yo haya desvanecido. Por ti. Por ti, por mi.
Son tus brazos mi cuna. Tus labios el fruto prohibido que probaría una y mil veces antes de ser expulsado de este paraíso terrenal.

Sufrires y vivires. Algunos hirieron, otros aún duelen y escaran el alma.
Sentir hoy el abrazo de la noche es nada comparado a tus besos.
La brisa del viento se pierde entre el vaivén de tu cabello.
Creamos y creeremos, creímos y juntos seguiremos creyendo.

Ven conmigo, que yo cantaré tu angustia, canta conmigo y bailemos este vals de amor y razón.
... Y entretanto yo seguiré cantando. Hoy cantamos por separado nuestra canción de amor, de locura, de infamia.


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Escarbo entre las imágenes de mi pasado. Hoy veo como algunos círculos se cierran.
Recuerdo recuerdos que me recuerdan porque no recordaba recordarlos...

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La rosa a la lluvia se debe, se alimenta de este purificador néctar de gloria que borra lo oscuro de ella,
se nutre, crece, muere y renace. Es el ciclo de la vida, las amistades y el amor.